El artista de fama mundial sigue trascendiendo el espacio escénico con sus innovadoras esculturas cinéticas y entornos performativos que fusionan arte, música, luz y tecnología.


Su currículum es impresionante. En los últimos veinticinco años, Es Devlin se ha consolidado como la diseñadora más influyente de escenarios y espectáculos, destacando en el arte de proponer viajes que rompen inventivamente la cuarta pared, en campos tan variados como el teatro, la danza, la ópera, la música, el arte y la moda. Es conocida por sus colaboraciones con estrellas del pop como Beyoncé, The Weeknd, Kanye West, Adele, U2 y Lady Gaga. Pero sus proyectos también incluyen espectaculares diseños espaciales para giras y conciertos, obras de teatro como Hamlet con Benedict Cumberbatch o The Lehman Trilogy de Sam Mendes, ceremonias de clausura como los Juegos Olímpicos de Londres y desfiles de moda para Louis Vuitton y Dior. Y la lista continúa. A sus 51 años, Esmeralda, alias Es, Devlin es una visionaria que ha ganado numerosos premios por su extraordinaria narración y sus esculturas de luz cinética, y que experimenta constantemente con nuevas tecnologías.
En la cima de su juego


En sus proyectos más recientes, la artista creó Come Home Again, una escultura de luz encargada por Cartier e instalada en el exterior de la Tate Modern, con 243 especies londinenses en peligro de extinción. Para el desfile de moda masculina primavera-verano 2023 de Yves Saint Laurent, diseñó un anillo de metal brillante, una especie de halo etéreo que rodeaba el desfile en el desierto marroquí. En febrero de 2022, se encargó del espectáculo del descanso de la Super Bowl de Los Ángeles, protagonizado por Dr. Dre, Snoop Dogg, Eminem, Kendrick Lamar y Mary J. Blige. En 2021, la instalación Forest of Us invitaba a los visitantes a adentrarse en un laberinto de espejos para Superblue en Miami. Con Blue Sky White, propuso una expresión escultórica, en dos partes, de nuestra respuesta emocional a la posible extinción del cielo azul. En cuanto a Memory Palace en 2019, esta pieza de bravura exploraba nuestra relación con la memoria, una cartografía "subjetiva y personal" de 73 momentos cruciales de la historia de la humanidad. Es Devlin sigue revolucionando los códigos de la escenografía, reafirmando con cada proyecto que el decorado no es un mero ornamento, ni el escenario un mero accesorio, utilizando el poder de la imaginación, que ella concreta y trasciende con mano maestra.
Nathalie Dassa








