Perfumería: diseño de frascos

NO IMPORTA LO BORRACHO QUE ESTÉS, MIENTRAS TENGAS LA BOTELLA

Al igual que las tendencias olfativas han evolucionado a lo largo de las décadas, también lo han hecho los estuches para perfumes. Desde los locos años veinte, cuando Lalique y Baccarat eran las estrellas, los diseñadores han impregnado su época con su creatividad. Un talento que sigue reinventándose hoy, en plena emergencia ecológica.

Fue a principios del siglo XX cuando el frasco de perfume adquirió su propio esplendor, en particular gracias al vidriero René Lalique. Lalique diseñó frascos para Coty, Molinard y Houbigant en estilo Art Nouveau, muy de moda en aquella época. Guerlain también recurrió a Baccarat para vestir sus creaciones con suntuosos estuches.

Fue un arte recuperado en la posguerra por artistas como Pierre Dinand. En más de sesenta años de creación, firmó 700 frascos, entre ellos los deEau Sauvage de Dior, Calandre de Paco Rabanne yOpium de Yves Saint Laurent. Desde 2015, su nieto Jules trabaja a su lado, añadiendo el modelado 3D a la experiencia familiar. Juntos diseñan botellas para marcas confidenciales como Maison Rebatchi y Eaux Primordiales. 

Si las perfumerías nicho innovan en el terreno olfativo, también sacuden los códigos del diseño... Privilegiando los frascos aerodinámicos, como Gabrielle Chanel un siglo antes, para despojar al frasco de todo ornamento con el fin de sublimar lo esencial: el perfume. Los frascos de la marca Matière Première, por ejemplo, se inspiran en los frascos de ingredientes utilizados por los perfumistas, cuyos moldes eran fabricados a medida por el vidriero Waltersperger. 

Desde hace más de veinte años, la agencia Centdegrés se rodea de los mejores expertos para diseñar frascos originales. Como el magnífico frasco de La Panthère de Cartier (2014), creado en colaboración con el grupo Pochet, cuyos innovadores conocimientos se utilizaron para esculpir el interior del frasco. Paco Rabanne dará que hablar en 2019 con la Pacollection, una gama de seis fragancias en un frasco flexible patentado. 

Por último, las preocupaciones ecológicas llevan a los diseñadores a favorecer el uso de vidrio reciclado, bombas desenroscables y frascos rellenables. Chanel, por ejemplo, ha recurrido a Sulapac para el envasado de sus Eaux, con vidrio muy ligero y tapones tejidos con materiales vegetales. La marca también ha lanzado una edición limitada de N°5 en vidrio reciclado, gracias a la experiencia del grupo Pochet.

Otras innovaciones están aún por llegar, a juzgar por la edición de 2022 de Luxe Pack, en la que más de 450 expositores han apostado por el ecodiseño y la sostenibilidad. 

                                                                                                               Sophie Normand 

Las experiencias y la cultura que nos definen

No se pierda ningún artículo

Suscríbase a nuestro boletín